El pelaje del Bulldog Francés es corto, liso, brillante y fino. La piel está flácida y arrugada, especialmente en la cabeza y los hombros, y tiene una textura suave.
Los Bulldogs franceses vienen en una variedad de colores, que incluyen beige, crema, varios tonos de atigrado, un pelaje estampado con manchas y rayas de marcas claras y oscuras, como el atigrado negro y el atigrado tigre llamativo, y el atigrado y el blanco, conocido como atigrado. De varios colores.
Los Bulldogs franceses son bastante fáciles de arreglar y solo necesitan un cepillado ocasional para mantener su pelaje saludable. Son mudadores promedio. Comience a preparar a su perro bulldog francés a una edad temprana y enséñele a su cachorro a pararse en una mesa o en el piso para que esta experiencia sea más fácil para ambos. Debe revisar los oídos, los ojos y los dientes en busca de secreciones o malos olores. Ambos son signos de que su perro puede necesitar ver al veterinario.
Limpie los oídos con regularidad con un paño húmedo y tibio y pase un hisopo de algodón por el borde del canal. Nunca introduzca el hisopo de algodón en el canal auditivo real. Si los bordes de las orejas están secos, aplique aceite mineral o de bebé con moderación. El aceite también se puede usar en la nariz seca.
Los Bulldogs franceses no se desgastan naturalmente las uñas y necesitarán que les corten las uñas con regularidad. Esto evita que se parta y se rasgue, lo que puede ser doloroso para el perro.
Mantenga las arrugas faciales limpias y secas para prevenir infecciones bacterianas. Siempre que bañe a su perro, tómese el tiempo para secar completamente la piel entre los pliegues. Bañe a su Bulldog Francés mensualmente o según sea necesario, y use un champú para perros de alta calidad para mantener los aceites naturales en su piel y pelaje.