0 Grado. Mordedura de serpiente sin evidencia de envenenamiento con dolor mínimo o nulo, pulgada de eritema y sin anomalías sistémicas o de laboratorio dentro de las 12 horas posteriores a la mordedura.
I Grado. Sospecha de mordedura de serpiente, evidencia mínima de envenenamiento, dolor moderado, 1 a 5 pulgadas de eritema y sin anomalías sistémicas o de laboratorio dentro de las 12 horas posteriores a la mordedura.
II Grado. Evidencia moderada de envenenamiento, dolor severo, eritema diseminado, petequias y síntomas sistémicos.
III Grado. Envenenamiento severo, eritema diseminado o generalizado, edema, equimosis y petequias, síntomas sistémicos graves e inestabilidad hemodinámica. El paciente puede presentar inicialmente síntomas leves y progresar rápidamente.
IV Grado. Sospecha de mordedura, envenenamiento muy severo, generalmente una serpiente más grande, dolor intenso repentino, síntomas sistémicos, colapso hemodinámico o muerte. El grado de envenenamiento es importante porque determina si el antiveneno se usa inicialmente y la cantidad que se usa.